La Inteligencia Artificial y sus aplicaciones en la medicina

Hace tiempo que la Inteligencia Artificial se transformó en una realidad, y con ello, empezó a formar parte de nuestras vidas. Aunque todavía se halla en una fase inicial y de desarrollo, ya que su evolución es constante, la concebimos como una herramienta destinada protagonizar el futuro siendo capaz de crear una gran revolución en la sociedad y, por tanto, en el sector sanitario.

La Inteligencia Artificial (IA) la entendemos como la combinación de algoritmos planteados con el propósito de crear máquinas que presenten las mismas capacidades que el ser humano. Se trata de una tecnología que todavía se percibe lejana, y en gran medida desconocida, pero que hace ya varios años que forma parte de nuestro día a día.

Este sistema es un intento de imitación de la inteligencia humana a través del uso de un robot o de un software. El hecho de que las máquinas piensen y razonen por su cuenta es uno de los avances más importantes de la tecnología en los últimos siglos.

La aplicación de la Inteligencia Artificial en la medicina

La aplicación de este tipo de inteligencia en el ámbito de la medicina ha implicado la instauración de una tecnología que cuenta con el potencial para revolucionar el sector de la salud y aumentar el abanico de posibilidades a médicos, , investigadores o empresas farmacéuticas.

Los avances que aporta esta nueva inteligencia abarcan distintos ámbitos, como, por ejemplo, el análisis de la información, y los diagnósticos y tratamientos de enfermedades, que hoy en día ya contribuyen a salvar vidas y a mejorar el servicio ofrecido a los pacientes.

Antes de la llegada de la Inteligencia Artificial en la medicina, en la década del 2000, solo se podían tener en cuenta y trabajar variables limitadas en datos limpios y bien organizados. En cambio, hoy en día, se ha demostrado que las herramientas de Machine Learning que usan redes neuronales artificiales para trabajar relaciones que resultan complejas, o las tecnologías Deep Learning, respaldan e incluso son capaces de superar las capacidades humanas para realizar algunas tareas relacionadas con la medicina.

Los sistemas de Inteligencia Artificial en medicina están diseñados para abordar los datos complejos que se han generado a partir de la atención clínica moderna.

¿Cómo empleamos la Inteligencia Artificial en la medicina?

Esta nueva Inteligencia permite emplear su uso abarcando distintas ramas dentro del sector médico. Algunos de los métodos para los que se está utilizando, son, por ejemplo, para mejorar y facilitar los informes médicos, los registros de pacientes, los ensayos, y en las revistas médicas para descubrir insights a través de la extracción de datos relevantes.

Las herramientas que cuentan con Inteligencia Artificial son capaces de identificar relaciones significativas en datos sin procesar, y su versatilidad les permite aplicarse en casi todos los campos del sector sanitario, como el desarrollo de fármacos, las decisiones de tratamiento, el cuidado del paciente, y aquellas decisiones que tienen que ver con los factores financieros y operativos.

A través de este sistema avanzado, los profesionales médicos podemos resolver problemas complejos que sin esta ayuda nos resultaría complicado gestionar, dedicando más tiempo y resultando el proceso mucho más ineficaz. Por este motivo, el uso de la Inteligencia Artificial tiene mucho valor en la medicina y en nosotros, los sanitarios, a quienes nos permite usar mejor nuestras habilidades aportando valor al sector de la salud.

Beneficios que aporta la Inteligencia Artificial al sector médico

Una de las mayores ventajas que ofrece el uso de la Inteligencia Artificial en el sector de la medicina es la extracción de información relevante a partir de inmensas cantidades de datos, a través de la cual genera insights acertados en distintos ámbitos.

A parte de este gran beneficio, el sistema inteligente aporta a nuestro sector otras muchas ventajas, entre las cuales destacamos las siguientes:

• La detección de insights a partir de los datos de los pacientes.
• La generación de insights para una optimización en los tratamientos.
• La identificación de patrones que ayuden a los investigadores a crear conjuntos de pacientes para estudios y ensayos clínicos.
• La obtención de mejores diagnósticos gracias al efectivo tratamiento de los datos.
• Nuevas y más eficaces formas de tratar a los pacientes.
• La búsqueda y la presentación de datos que ayudan a las personas a encontrar información útil sobre la salud.

Todas estas ventajas aportan una mejora en la calidad de trabajo relacionado con la medicina, contribuyendo a un aumento en la calidad del servicio ofrecido y a una evolución constante dentro del sector.

Factores de la Inteligencia Artificial que pueden afectar negativamente a la medicina

Esta capacidad de que las máquinas piensen y razonen por su cuenta a través de la evolucionada Inteligencia Artificial resulta uno de los avances más importantes de la tecnología en los últimos siglos.

Aunque, una falta de conocimiento y control sobre esta innovación puede traer problemas, y por ello, es importante ser conscientes de algunos factores que pueden transformarse en desventajas, para gestionarlos y reducir al máximo el peligro que puedan generar. Estos son algunos de ellos:

• Existe una falta de normativa en relación con el uso de la Inteligencia Artificial en la medicina.
• Hay que tener presente que los datos sobre los pacientes son confidenciales.
• Su utilización puede facilitar el uso irresponsable de datos médicos. No hay una regulación específica, y por ello, la información obtenida a través de la Inteligencia Artificial podría utilizarse con fines inadecuados.
• Existe una falta de preparación de los médicos, ya que una gran parte de los profesionales sanitarios aun debemos adaptarnos al uso de estas nuevas tecnologías.
• Hay una falta de actualización de instrumentos médicos. No todos los centros sanitarios tienen los recursos suficientes para disponer de estas herramientas.

La Inteligencia Artificial ha llegado para quedarse. Se trata de una gran revolución capaz de aportar innovaciones, facilidades y evoluciones a la sociedad, y en concreto, al mundo de la medicina. Todos los avances que esta Inteligencia pueda dar a los profesionales médicos en el desarrollo de su trabajo permitirán una mejora en la calidad de vida de las personas y en su bienestar.

No olvidemos que, para ello, es muy importante hacer un buen uso de sus herramientas y mantener sus efectos y su uso bajo control.

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